lunes, 12 de enero de 2015

Despierta... No permitas que el ego duerma tu corazón!


Hay personas que con el tiempo parece que se aletargan emocionalmente...

No dejan de sorprenderme algunas gentes...
Cuanto mayores se hacen más prescinden del "nosotros", de lo compartido, se tornan más egocéntricos. Es como si cada mañana, al ponerse frente al espejo, se colocaran una corona invisible, que les otorgara la facultad de estar por encima del bien y del mal, una enseña que les hiciera poseedores de la verdad absoluta y además se vistieran el "traje del emperador", ese con el que no se permiten ponerse en duda a si mismos.
El afán de protagonismo y de posesión se vuelve día a día más patente y más dañino.

" Yo he tenido un buen año... Yo lo he hecho bien...Yo se lo que es mejor... Yo conseguiré...Yo tendré....Yo seré... yo digo... yo hago... yo sé...  yo, yo, yo...."

Es sofocante el permanecer a su lado, fagotizan tu energía convirtiéndote, a poco que te descuides, en un ser diminuto, haciéndote dudar de lo que sabes, lo que decides e incluso de lo que piensas o deseas.
Muchos de nosotros nos hemos visto en situaciones donde nuestras actuaciones se producían en base a las querencia de otra persona, llegando incluso a congelar nuestro propio yo, adormeciéndenos de tal manera que ya deja de preocuparnos el sentido de lo que hacemos pasando a buscar únicamente el reconocimiento y la fuerza que unirte al "poderoso" otorga...
  .
Y lo curioso es que atraen a los demás como si de un potente imán se tratara, son admirados, incluso venerados en muchas ocasiones, envidiados, porque lo que se ve de ellos es solamente la cara del éxito y el posicionamiento social, pero... ¿A qué precio?

Son personas que utilizan a los demás como si de piezas de un tablero de juegos se tratara, que no valoran al otro, que se creen en posesión de la verdad,  que se consideran imprescindibles, y lo que es peor que consideran a los otros incapaces si no están bajo su tutela, que siempre quieren más y más de lo que sea que tengan...
solamente desde una mente muy centrada y una posición de condescendencia y "compasión" se puede sobrellevar ese abuso de poder que ellos ejercen.

Yo sólo quiero, desde esta ventana, avisar a aquellos que conviven con este tipo de personas , ya sean sus jefes, sus parejas, sus madres, padres, amigos o compañeros.
Abrid bien los ojos, no os dejéis contagiar por su vanidad, no les imitéis en aquello que acabe, a la larga, perjudicándoos, seguro que tienen valores importantes, valores que se pierden tras esas mascaras de prepotencia, os aseguro que el ningunear, no es uno de ellos. 
El ego al final es un reflejo de la inseguridad. 
Él que está seguro de quien es y conforme con quien es, no necesita ni demostrar su superioridad ni pregonarla.

Ellos han dejado que su corazón permanezca aletargado, pero nosotros tenemos que despertar los nuestros.

La confianza en las personas, el valorar y dar su lugar a  demás, el no perder el sentido de la ética ni dejarse seducir por el dinero nos ayudarán a mantener nuestros corazones vivos y despiertos , si no lo hacemos corremos el riesgo de convertirnos en uno mas, de los eternos insatisfechos con fachada de ganadores que pululan por nuestra sociedad...


7 comentarios:

  1. Preciosos Pensamientos, Preciosas Palabras Yola.
    Gracias por tu Sensibilidad y tu Saber Hacer y Llegar.
    Besicos Mil!

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  2. Preciso, real y auténtico. Me gusta y mucho

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  3. Importante detectarlas a tiempo antes de caer en sus garras. Muchas gracias por ponernos en aletta, Yolanda.

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  4. Gracias Yola, estaré ojo avizor.

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  5. Gracias,.en mi entorno hay casos , no muchos pero hay.....
    No es facil .....pero ojito.
    Muy bonito. Como siempre. Bss

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  6. Tod@s tenemos en mente nombres de susodichos...felicidades Yola, como siempre una leccion del buen hacer...plumilla

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  7. Todos hemos topado en nuestro entorno cercano, la personalidad tóxica, el subidón del ego desmedido, para mi no construye nada. Al contrario las personas creativas carecen de esa mascara, la autenticidad y el valor hace eso personas con autoestima saludable; todos estos personajes son inseguros y lo mejor que no son felices por si mismo ni con los demas. Así que mejor que tu Yolanda lo has definido extraordinariamente.

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